mayo 1, 2019 / Blog
La importancia de la preboda
Hola, si estás leyendo este post, es porque piensas casarte, estás buscando fotógrafo o alguien que conozca lo que llegará próximamente. Muchos de ustedes piensan que la preboda es una forma más que tiene el fotógrafo para facturarles otro servicio, pero por ejemplo en mi caso (y me consta que en la gran mayoría de los profesionales) va incluido en el presupuesto inicial, por lo que ya descartamos ese aspecto de facturar más.
¿Qué es una preboda?
Como muchos la entienden, la preboda es la sesión previa a la boda, qué se puede celebrar cuando le venga bien a la pareja y al fotógrafo. De ella no suele haber pactado un número específico de fotos, pese a que suelen salir muchas (en mi caso más de cien). A su vez, es el primer acto de tres posibles. Preboda, boda y postboda.
¿Qué busco en mi preboda?
Pues algo básico y simple. Conocer a la pareja un poco más a fondo de lo que se podría hacer durante la firma de un contrato tomando café. Durante esta sesión, que además es muy divertida, tengo tiempo de aprender como interactúan entre ellos y por separado. Sin contar que es ahí donde la mayoría de las parejas te resaltan cual es su perfil bueno, te dejan claro posibles problemas entre familiares (algo muy normal y no pasa nada), indican las fotos que no pueden faltar o alguna que otra sorpresa de ese día. En resumen, ya me has aportado mucha más información de la que me darías si no la hubiese realizado. Además sería la segunda vez que nos vemos y eso suma.
¿Son válidas las fotos de la preboda?
Rotundamente sí. Es cierto que a un alto porcentaje de parejas les parece un lío quedar unos meses antes (es lo recomendable ya que el tu nivel de estrés irá creciendo a medida que se acerque la fecha de tu enlace), pero una vez la estamos realizando, se lo pasan “pipa”. Indistintamente de la ubicación (por ejemplo en Gran Canaria o cualquiera de nuestras islas Canarias disfrutamos de campo o playa) salen unas fotos preciosas. La primera media hora suele ir destinada a conocernos. De ahí en adelante, que hablen los protagonistas con sus besos, caricias, miradas, etc.
Un valor extra de seguridad
Tal y como la vida misma, al repetir algo, siempre se mejora. Con la fotografía pasa igual que con todas las disciplinas. Después de haber realizado esa toma de contacto en forma de preboda, mucho más relajados y receptivos para El Gran Día. Créanme si les digo que se nota cuando se hace una preboda en condiciones. Se crea un vínculo de confianza buenísimo entre quienes se casan y yo. Al margen de que en las bodas prima la espontaneidad, es cierto, pero que nadie se engañe, también hay posados y momentos donde sabes que ustedes, como pareja, son el centro de mi objetivo, y nunca mejor dicho.
Escrito esto anteriormente, y bajo mi opinión, la preboda es importantísima, así que no dejes de disfrutar de ese ratito de fotos.